Pese a que el volumen de robo de gas disminuyó durante 2019 respecto a los datos de 2018, el número de tomas clandestinas en la red de Pemex se disparó el año pasado, por lo que el gobierno de AMLO considera que dicho fenómeno podría estar relacionado con acciones de sabotaje por parte de empresas competidoras de la petrolera mexicana.
En su conferencia mañanera de este martes 7 de enero, el mandatario federal expuso que una de las teorías en torno al “enigma”, es la posibilidad de que se trate de una estrategia para intentar debilitar la empresa productiva del Estado mexicano.
En su intervención, el director general de Pemex, Octavio Romero, dio a conocer los resultados del combate al huachicoleo. En cuanto al apartado de tomas clandestinas de gas, indicó que si bien se disminuyó en más de un 50 por ciento el robo en desviación volumétrica, las tomas se dispararon, pues pasaron de 205 en 2018 a mil 323 en 2019.
Se redujo en un 91 por ciento el robo de combustibles
Romero Oropeza informó que en un año se redujo en un 91 por ciento el robo de combustibles en el país, lo que significa un ahorro de 56 mil millones de pesos.
Explicó que las acciones llevadas a cabo durante la presente administración permitieron mantener el promedio de robo en cinco mil barriles diarios y se espera que al término de 2020, se logre reducir a la mitad esta cifra. De los más de 20 millones de barriles perdidos en 2018, para 2019 la cifra se ubicó en un millón 800 mil.