La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó que los señalamientos de “Área Restringida” instalados en Playa Bagdad, Tamaulipas, fueron colocados por una empresa contratada por el gobierno de Estados Unidos, aunque aclaró que se trató de un problema en la delimitación territorial.
De acuerdo con la mandataria, el cauce del río en la zona fronteriza ha cambiado con el tiempo, lo que generó confusión sobre los límites establecidos en los tratados internacionales. Por ello, explicó que tanto instituciones mexicanas como estadounidenses trabajan en una revisión técnica para precisar la frontera en esa región del Golfo.
La Secretaría de Marina (Semar) informó que retiró de manera preventiva seis letreros que habían sido instalados en territorio nacional. En su comunicado, la dependencia señaló que el Consulado de México en Brownsville no encontró evidencia de que los señalamientos hubieran sido colocados oficialmente por alguna autoridad estadounidense. Por ello, la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) iniciará consultas técnicas para esclarecer el hecho y revisar los mapas e instrumentos que definen la frontera.
El activista Elías Ibarra relató que los letreros fueron colocados por personas que cruzaron en lancha desde Estados Unidos, quienes argumentaron que se trataba de una zona restringida bajo disposiciones de seguridad de ese país. Sin embargo, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) descartó que existiera una orden oficial del gobierno estadounidense para instalar dichos avisos.
Sheinbaum subrayó que el incidente ya fue expuesto ante el consulado y la embajada mexicana, y reiteró que se trató de una confusión derivada de los cambios naturales en el cauce del río. “Lo que corresponde ahora es delimitar con mayor precisión el límite territorial en Tamaulipas y el Golfo, con apoyo de ambas naciones”, puntualizó.
